El pasado mes de agosto visitamos la Basílica de la Santa Casa en la localidad de Loreto (Italia).
Dentro de la basílica, en el crucero, se encuentra una estructura o revestimiento de mármol, diseñado por Bramante y terminado en 1538, que protege la Santa Casa.
Dentro del revestimiento se accede a la Santa Casa, los muros trasladados desde Nazaret, que constituían la casa donde nació María, donde pasó su infancia, donde recibió la Anunciación por parte del ángel Gabriel y donde vivió la Sagrada Familia.
La tradición lauretana cuenta que en 1291, en época de las cruzadas, y temiendo por la integridad de la casa en Nazaret (donde sobre la cual se habían erigido templos a lo largo de los siglos), los tres muros de la casa fueron trasladados primero a Dalmacia y luego a diferentes emplazamientos en Italia, hasta llegar el 10 de diciembre de 1294 a Loreto.
En la basílica hay una serie de paneles con explicaciones, de los cuales dejo tres aquí debajo (en italiano).
En el primer panel se muestra cómo los tres muros junto con un gruta en la roca formaban la casa de la Virgen en Nazaret. También se hace referencia a cómo dice la tradición que fue transportada: con asistencia de ángeles (otras fuentes hablan de la familia bizantina Angeli del siglo XIII que pudo estar detrás del traslado), y por qué en Loreto, localidad cercana a Recanati, de donde era obispo el Vicario del Papa, Salvo.
En el segundo panel se muestra cómo eran las basílicas que en Nazaret se erigieron sobre la Santa Casa.
También se muestra la estructura que se ha construido en Loreto para completar la Casa a partir de los tres muros trasladados desde Nazaret.
La comparación de los ladrillos en Loreto, que no son locales, con excavaciones arqueológicas en Nazaret donde se encontraron materiales y formas de construir similares son algunos de los elementos a favor de la tradición lauretana.
El tercer panel muestra imágenes de las inscripciones que se pueden ver dentro de la Casa (no se permite fotografiar dentro), en letras griegas y hebreas, como “Jesu Cristo, Hijo de Dios”, o símbolos judeocristianos como el Pleroma y Kenoma, de plenitud e imperfección, del cielo y de la tierra.
La basílica cuenta, entre otras, con una capilla “americana” o capilla de la Asunción. Está decorada con pinturas de Beppe Steffanina sobre la Asunción y sobre la “Glorificación de la Virgen Lauretana, Patrona Universal de la Aviación” (ver debajo).
En esta obra se puede ver la Santa Casa llevada en volandas por varios ángeles en presencia de varias figuras contemporáneas e históricas:
- Benedicto XV (con el decreto de 1920 en la mano que declaró a la Virgen de Loreto como Patrona), Pío XI y Juan XXIII que la coronaron respectivamente en 1922 y 1962,
- el mito de Ícaro y Leonardo da Vinci (abajo a la izquierda),
- los astronautas Gagarin (CCCP en el casco) y Armstrong (papel con las palabras questo piccolo passo),
- un tercer astronauta (a la izquierda de Armstrong) que he visto referido como McDevitt y como Aldrin, pero creo que es Frank Borman, comandante del Apollo 8, misión que orbitó por primera vez alrededor de la Luna en Nochebuena de 1968, y que siendo televisados en directo leyeron versos del libro del Génesis. En esa misión llevaban un medallón de la Virgen de Loreto, que es lo que parece que lleva el astronauta en el brazo,
- Kennedy (a la izquierda de Borman), quien puso como objetivo llegar a la Luna,
- la perra Laika (a los pies de Armstrong),
- Orville Wright a bordo de su Wright Flyer,
- un avión cuatrimotor (¿un DC-8?), varias naves espaciales indeterminadas, un globo, un dirigible…
Finalmente, siendo la Patrona de la Aviación, fuera de la basílica, hay un Aermacchi MB-339 de los que usa la patrulla italiana Frecce Tricolori.
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